En muchas ocasiones, cuando nos llamáis para proponernos el tema de una decoración, nos encontramos con un problema: nos pedís un tema del que no podemos emplear los logotipos oficiales o imágenes que están protegidas por derechos de autor. Esto mismo ocurrió cuando Pilar nos llamó para que montásemos una mesa de chuches para su peque. Alejandro quería una mesa de su equipo favorito y, como podéis imaginar, no podíamos emplear el escudo.
Así que lo que decidimos hacer fue usar los colores del equipo e intercalarlos con el negro.
Nos basamos en el diseño que creamos hace ya algunos años para la comunión de Álvaro pero, esta vez, metimos el color malva y el blanco tanto en la decoración como en las chuches de la mesa. De esta forma, y añadiendo un escudo de chocolate que también hacía referencia al equipo, ¡la temática de la mesa estaba clarísima!
Esta vez animamos el campo de fútbol con unos muñequitos que quedaban muy graciosos y que mucho nos tememos que más tarde servirían para echar alguna partida de futbolín improvisado.
El banquete de la comunión se celebró en el restaurante Marboré, en Torrelodones, un espacio precioso que dispone además de una hípica en las mismas instalaciones.
Añadimos a la decoración algunos detalles que visten la mesa y resultan muy útiles para que todo el mundo encuentre su sitio.
Además colocamos un protocolo a la entrada, de manera que cada invitado pudiese encontras de forma sencilla su ubicación en la mesa.
La decoración quedó muy bonita, ya que la personalización con los colores y el nombre de Alejandro le daban a la celebración un toque único. Todo estaba combinado, incluido el envoltorio de los llaveros monísimos que Pilar, la madre, había comprado.
Esperamos que el día de la comunión merengue de Alejandro fuese muy especial para todos.